Feliz NBAvidad!!

Feliz Navidad queridos lectores. Espero que lo hayáis pasado la mitad de bien que lo pasé yo ayer. Porque ayer fue mi día, ese día que tantos llevábamos esperando desde hace meses: ¡¡¡ayer volvió la NBA!!!

Durante todo el día Canal Plus España ofreció en uno de sus canales de deportes una programación acorde con el evento. Baloncesto a todas horas y en todas sus vertientes. En mi caso no pude disfrutarlo todo, ya que el 25 de Diciembre además de ser Navidad, es el día de cumpleaños de mi novio y fuimos a comer con su familia. Pero eso sí, yo avisé, desde las seis de la tarde no quiero saber nada de nadie, porque a esa hora comenzaba el menú con un Boston Celtis VS New York Knicks que nos puso los pelos de punta. 

El partido comenzó con el poderío de los de la Gran Manzana, que arrasaron a unos Celtics algo viejos y fuera de forma, que además no contaban con Paul Pierce, uno de los pilares fundamentales del Big Three. Pero estaba Rondo... que fue quien les mantuvo en el partido, a eso le llamo aprovechar bien un parón, porque no sé que comería Rondo en estos meses, que ha vuelto más fuerte que nunca. Una maravilla que consiguió 31 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias y 5 robos de balón. Números de un verdadero genio. 

Rondo y C. Anthony, los mejores del partido, en plena lucha .

El partido terminó 106-104 para los de Nueva York, que en el tercer cuarto sufrieron una pájara (no sé de que otra manera calificarlo) y los Celtics consiguieron ponerse hasta 10 puntos por delante cuando Nueva York había liderado hasta por 16 solo unos minutos antes.

Con un final de infarto y un par de oportunidades perdidas por los de Boston para empatar el partido y mandarlo a la prórroga, la historia terminaría en tangana y como no, Kevin Garnett en ella. Justo después de fallar la canasta que podría haber empatado el partido a solo  unos segundos del final, Garnett agarró del cuello a un rival y seguramente sea sancionado. ¡Vaya gesto más feo para el día de Navidad!

Después del clásico del Este, nos desplazamos hasta Dallas, hogar de los Mavericks. Se enfrentaban a Miami Heat, el rival al que vencieron en la final del año pasado. Y tenían ganas de revancha, eso quedó claro. 

Nowitzky y Wade en plena lucha.

De este partido no voy a comentar mucho, porque la verdad que me aguó un poco la fiesta NBAvideña. Primero porque Dallas salió a verlas venir y al final maquilló un resultado (105-94) que no refleja la verdadera paliza que le dieron los Heat a los Mavs. En el último cuarto se pusieron las pilas, pero llegaron a ir perdiendo de 35, una verdadera pasada. 

Como no soy una gran fan de los "Beach Boys", me repateó las tripas ver como vapuleaban a un equipo que me cae bastante mejor. Así que dejemoslo en que Lebron hizo sus "Lebronadas" y Wade alguna de las suyas. En el lado Mavs, se notó que Nowitzky llevaba dos meses sin hacer nada, le costó muchísimo entrar. Y de Vince Carter, su nueva incorporación, mejor no hablo porque vaya pedradas tiraba a canasta... Lo único que destacaría demás en este partido fue al base "rookie" Cole, que debutó en Miami y me dejó muy buenas sensaciones. 

Y por último ya a eso de las once y media de la noche, llegó un partido del que no esperábamos nada y del que sacamos mucho: Chicago Bulls VS Los Ángeles Lakers. Que gran calidad de baloncesto se vio en el Staples Center anoche. 

Los Lakers defendiendo como hacia años que no se los veía defender. Kobe siendo el Kobe que todos queremos incluso lesionado, Gasol demostrando porqué merece quedarse donde está con esa clase que le caracteriza, los nuevos como MacRoberts dándolo todo... en fin, digno de verse. 

Rose y Kobe: los directores del espectáculo de ayer.

En frente tuvieron a unos Bulls con una Noah picadísimo con Gasol (aún escuece el europeo eh, jujujuju) y un Rose que salió de pista una vez, volvió a entrar y parecía otro: increíble actuación del jugador rojo, una pasada. 

El partido terminó un poco como el de Nueva York, última jugada para ganar uno abajo en el marcador por canasta anterior de Rose, que no consigue Kobe convertir. El marcador terminó 87-88, señal de las intensas defensas que se vivieron en el partido, se nota la mano de Mike Brown ya en los Lakers y en los Bulls lo de siempre, si hacen su defensa, hacen su partido. 

Ojalá todas las noches de NBA que nos esperan en 2012 sean como la de ayer. Una maravilla señoras y señores, I Love This Game.